Una nave de forma triangular, además de los discos y puros, es frecuentemente vista en todo el mundo
Durante algunos años, tras el accidente del Ovni en Roswell en 1947, el gobierno norteamericano pensaba que los avistamientos de objetos voladores no identificados eran íntegramente de naturaleza alienígena pero no tardaron mucho en constatar que la mayoría se trataba de Ovnis nazis construidos en la Antártida y otras ubicaciones secretas y bases subterráneas, y el Presidente Truman ya sabía que estaban tratando con Ovnis alemanes.
Numerosos expedientes confiscados por los aliados en las bases secretas alemanas en las montañas Harz, Thuringia y Peenemünde se referían a esta ubicación en la Antártida. Durante la II Guerra Mundial, Alemania estuvo enviando material a la Antártida y a otras ubicaciones conocidas sólo por Himmler, Kammler y algunos científicos. También establecieron fábricas secretas de Ovnis en áreas remotas en Canadá, hecho confirmado por el Dr. von Braun.
Y en 1951, la Unión Soviética y los Estados Unidos secreta y conjuntamente enviaron dos expediciones a la Antártida para espiar los nuevos centros alemanes de posguerra y sus fábricas subterráneas en Nueva Suabia (en alemán, Neuschwabenland). Las expediciones son mencionadas en memorándums secretos del General Walter Bedell Smith y Allen Welsh Dulles, director y subdirector, respectivamente, de la CIA en ese tiempo.
Según el investigador Maximillien de Lafayette entre un 90% y un 95% de los OVNIS divisados en el mundo desde 1921 son fabricados por científicos alemanes y procedentes del Tercer Reich en ubicaciones remotas y secretas. Entre el 1% y el 6% son construidos por científicos americanos. (Incluyendo científicos de Australia, Canadá y los alemanes que fueron llevados a los Estados Unidos en la operación Paperclip). Entre un 3% y 4% son objetos de origen intraterrestre. Y un 1% de origen desconocido. Lafayette considera a los denominados "grises" como intraterrestres ubicados en instalaciones principalmente submarinas.
Para el Dr. von Braun, ingeniero aeroespacial alemán, nacionalizado estadounidense en 1955 en la operación Paperclip, los Ovnis neoalemanes no son amenaza y sólo están “intimidando”. El Dr. Teller, físico húngaro, naturalizado estadounidense en 1941, “padre de la bomba de Hidrógeno”, le dijo al presidente Harry Truman que estaban “retando”, “hostigando”.
Para Lafayette, los alienígenas, conocieron el planeta Tierra hace millones de años explorando el cosmos: entre otros, los Annunakis, los Lyranos, los Zetas (grises) y los seres de Ashtari-Aldebarán. Los Anunnakis trabajaron genéticamente al humano y vivieron en Mesopotamia, África, Anatolia, Oriente Medio, y parte de Sudamérica; estuvieron, con algunas interrupciones, hasta hace varios miles de años. Un número de Zetas (Zeta Reticulianos o "grises") se quedaron aquí y habitan zonas intraterrestres principalmente submarinas. Los Ovnis divisados de los "grises" son en su mayoría fabricados en la Tierra y raramente se ven los originales traídos de Zeta Retículi.
En la Alemania Nazi hubo dos líneas completamente separadas de construcción de Ovnis. 1º- Científicos alemanes y austriacos trabajando en sistemas de propulsión basados en datos científicos ya fueran tradicionales o de vanguardia, que pronto pasaron al control de las SS; y 2º - el proyecto de María Orsic y el Dr. Otto Schumann basado en datos técnicos ofrecidos por unos seres que decían ser mensajeros del planeta Ashtari/Aldebaran. La primera tecnología, cayó en manos de los americanos con la operación Paperclip; los objetos voladores basados en la tecnología extraterrestre de María Orsic son la matriz de los actuales Ovnis neoalemanes o neonazis, a miles de años de distancia de la tecnología más avanzada de Estados Unidos y Rusia. Sobre la fuente de energía o combustible que alimentaba a los Ovnis alemanes de origen extraterrestre poco se sabe aunque María Orsic se refería al agua o un tipo de agua. La Fuerza Aérea de los Estados Unidos experimenta con el llamado "Vórtice de Agua" desde hace décadas.
María Orsic le llamo a su máquina volante una maquina volante para otro mundo; una maquina volante para la vida después de la muerte; una maquina volante para otra dimensión.
Los americanos capturaron montones de expedientes, planos, y datos técnicos de la primera y media fase del desarrollo y producción de los Ovnis alemanes y llevaron a los Estados Unidos miles de científicos alemanes para trabajar en el programa espacial y el desarrollo de maquinas volantes anti gravedad y otros exóticos y futuristas sistemas de armas. Con su ayuda lograron diseñar y construir 4 tipos de Ovnis. Los rusos también capturaron cientos de científicos y fueron capaces de desarrollar 2 tipos de Ovnis, aunque no tan sofisticados como los norteamericanos. Los británicos desarrollaron 2 clases de Ovnis. Los franceses no tienen ninguno. Pero los poderosos, desarrollados y alucinantes Ovnis, derivados de la tecnología extraterrestre de María Orsic, los tienen los neoalemanes o neonazis.
Fuente: http://alazul.com/articulo/102/90-ovnis-son-nazis-segun-un-investigador
Numerosos expedientes confiscados por los aliados en las bases secretas alemanas en las montañas Harz, Thuringia y Peenemünde se referían a esta ubicación en la Antártida. Durante la II Guerra Mundial, Alemania estuvo enviando material a la Antártida y a otras ubicaciones conocidas sólo por Himmler, Kammler y algunos científicos. También establecieron fábricas secretas de Ovnis en áreas remotas en Canadá, hecho confirmado por el Dr. von Braun.
Y en 1951, la Unión Soviética y los Estados Unidos secreta y conjuntamente enviaron dos expediciones a la Antártida para espiar los nuevos centros alemanes de posguerra y sus fábricas subterráneas en Nueva Suabia (en alemán, Neuschwabenland). Las expediciones son mencionadas en memorándums secretos del General Walter Bedell Smith y Allen Welsh Dulles, director y subdirector, respectivamente, de la CIA en ese tiempo.
Según el investigador Maximillien de Lafayette entre un 90% y un 95% de los OVNIS divisados en el mundo desde 1921 son fabricados por científicos alemanes y procedentes del Tercer Reich en ubicaciones remotas y secretas. Entre el 1% y el 6% son construidos por científicos americanos. (Incluyendo científicos de Australia, Canadá y los alemanes que fueron llevados a los Estados Unidos en la operación Paperclip). Entre un 3% y 4% son objetos de origen intraterrestre. Y un 1% de origen desconocido. Lafayette considera a los denominados "grises" como intraterrestres ubicados en instalaciones principalmente submarinas.
Para el Dr. von Braun, ingeniero aeroespacial alemán, nacionalizado estadounidense en 1955 en la operación Paperclip, los Ovnis neoalemanes no son amenaza y sólo están “intimidando”. El Dr. Teller, físico húngaro, naturalizado estadounidense en 1941, “padre de la bomba de Hidrógeno”, le dijo al presidente Harry Truman que estaban “retando”, “hostigando”.
Para Lafayette, los alienígenas, conocieron el planeta Tierra hace millones de años explorando el cosmos: entre otros, los Annunakis, los Lyranos, los Zetas (grises) y los seres de Ashtari-Aldebarán. Los Anunnakis trabajaron genéticamente al humano y vivieron en Mesopotamia, África, Anatolia, Oriente Medio, y parte de Sudamérica; estuvieron, con algunas interrupciones, hasta hace varios miles de años. Un número de Zetas (Zeta Reticulianos o "grises") se quedaron aquí y habitan zonas intraterrestres principalmente submarinas. Los Ovnis divisados de los "grises" son en su mayoría fabricados en la Tierra y raramente se ven los originales traídos de Zeta Retículi.
En la Alemania Nazi hubo dos líneas completamente separadas de construcción de Ovnis. 1º- Científicos alemanes y austriacos trabajando en sistemas de propulsión basados en datos científicos ya fueran tradicionales o de vanguardia, que pronto pasaron al control de las SS; y 2º - el proyecto de María Orsic y el Dr. Otto Schumann basado en datos técnicos ofrecidos por unos seres que decían ser mensajeros del planeta Ashtari/Aldebaran. La primera tecnología, cayó en manos de los americanos con la operación Paperclip; los objetos voladores basados en la tecnología extraterrestre de María Orsic son la matriz de los actuales Ovnis neoalemanes o neonazis, a miles de años de distancia de la tecnología más avanzada de Estados Unidos y Rusia. Sobre la fuente de energía o combustible que alimentaba a los Ovnis alemanes de origen extraterrestre poco se sabe aunque María Orsic se refería al agua o un tipo de agua. La Fuerza Aérea de los Estados Unidos experimenta con el llamado "Vórtice de Agua" desde hace décadas.
María Orsic le llamo a su máquina volante una maquina volante para otro mundo; una maquina volante para la vida después de la muerte; una maquina volante para otra dimensión.
Los americanos capturaron montones de expedientes, planos, y datos técnicos de la primera y media fase del desarrollo y producción de los Ovnis alemanes y llevaron a los Estados Unidos miles de científicos alemanes para trabajar en el programa espacial y el desarrollo de maquinas volantes anti gravedad y otros exóticos y futuristas sistemas de armas. Con su ayuda lograron diseñar y construir 4 tipos de Ovnis. Los rusos también capturaron cientos de científicos y fueron capaces de desarrollar 2 tipos de Ovnis, aunque no tan sofisticados como los norteamericanos. Los británicos desarrollaron 2 clases de Ovnis. Los franceses no tienen ninguno. Pero los poderosos, desarrollados y alucinantes Ovnis, derivados de la tecnología extraterrestre de María Orsic, los tienen los neoalemanes o neonazis.
Fuente: http://alazul.com/articulo/102/90-ovnis-son-nazis-segun-un-investigador
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